Elasticidad y flexibilidad de las membranas para balsas y estanques
¿Por qué son tan importantes estas cualidades en las membranas para balsas y estanques y por qué el EPDM las posee en grandes cantidades?
La elasticidad se define como “la capacidad de un material que se ha estirado de recuperar su tamaño y forma originales cuando deja de estar sometido a las fuerzas que provocaban el estiramiento”, mientras que la flexibilidad se conoce como “la capacidad de un material para doblarse sin romperse”. Las membranas de EPDM para balsas y estanques poseen una alta elasticidad y flexibilidad, lo que proporciona a los diseñadores libertad total en términos de creatividad. Estas membranas pueden utilizarse para impermeabilizar con óptimos resultados elementos de contención de aguas de cualquier forma y tamaño, sin importar su complejidad.
El elevado nivel de reticulación de las cadenas de carbono permite a las membranas de EPDM elongarse más de un 300 % en todas las direcciones y, lo que es más importante, recuperar posteriormente su forma inicial. En otras palabras, las membranas de EPDM para balsas y estanques tienen memoria. Esta es una cualidad de vital importancia, ya que permite absorber los movimientos del sustrato sin que ello afecte a las propiedades físicas de la membrana.
Las membranas de EPDM para balsas y estanques también son altamente flexibles por naturaleza. Los estudios demuestran que este tipo de membranas pueden doblarse una y otra vez más de 15 millones de veces sin mostrar señales de daño. Esta flexibilidad facilita el proceso de instalación, ya que permite a la membrana adaptarse con facilidad a formas irregulares. Cuando se someten a tensiones mecánicas, incluso a bajas de temperaturas de hasta –45 °C, las membranas de EPDM conservan sus propiedades de resistencia y flexibilidad. Un claro ejemplo de ello son las reservas de nieve artificial revestidas con membranas de EPDM hace más de 25 años y que siguen funcionando a la perfección. La membrana conserva su flexibilidad sin quebrarse, incluso tras varios años de exposición a las condiciones climatológicas más exigentes.
La combinación de elasticidad y flexibilidad permite a las membranas de EPDM adaptarse a las inevitables deformaciones del sustrato. Esto ofrece como resultado una excelente resistencia a la perforación, factor clave para la longevidad de los proyectos más complejos.
Uno de los ejemplos más impactantes de las excelentes cualidades de elasticidad y flexibilidad de las membranas de EPDM es el embalse de riego de Lorca (España), que se impermeabilizó con la membrana GeoGard EPDM en 1998. En el año 2011, un terremoto de magnitud 5,1 devastó la localidad y desplazó el embalse unos 20 cm. Pese a ello, el embalse no perdió ni una sola gota de agua, mientras que el 80 % de los edificios del pueblo lindante se vieron afectados por el seísmo. El embalse de riego se encontraba muy cerca del pueblo y de haberse derrumbado sus taludes, los daños habrían sido terribles.
La elasticidad y la flexibilidad otorgan a las membranas de EPDM una gran libertad creativa, facilidad de instalación y un excelente rendimiento y resistencia frente a las condiciones climáticas más exigentes.
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